viernes, 17 de abril de 2009

TANTOS DÍAS EN MI TORRE

Así continúa...

Tantos días en mi torre, esperé con desespero, a que mi juglar amante hiciera brillar su acero, para luchar por mi honor; hasta que el viento me trajo noticias de mi escudero.

Enteréme con desprecio, que de Flandes, en el tercio, batióse con paladín, que en palabra y por palabra, retóle con armadura, mostrando; ¡cara más dura! celo, encono… ¡hasta desdén! embistiendo sin mesura contra el humilde extremeño que medió con gran empeño por la puja de dos damas que entre plumas y entre organzas lanzábanse con veneno, dardos, que este juglar bueno, quiso frenar cauteloso, y el de Flandes hizo el oso cargando contra el osado.

¡No señor! No se equivoque, que la afrenta era de damas, que esperaban con deleite ser amadas en sus versos, en sus cantos… ocultando sus encantos, prestos por ser descubiertos.

Y el destino ¡Vive Dios! jugó baza en este trance, trenzó con lazos de amantes… de amantes de la escritura, de la chanza, la hermosura de amistades, de retos, de algarabías y de tantas melodías desgranadas a millares.

Bátanse vuesas mercedes; como huevos en tortilla, que yo sentada en mi silla, bordaré de mil amores, finas camisas y paños, pues desde antaño hasta hogaño, es sabido que una dama, no piensa, no es casquivana; aunque a mi me da la gana, tener voz y hasta opiniones, pues me sobran dos… razones para defender mi seso.

Pero también soy coqueta, y guardo corazón tierno, para entregar a mi amado, mi Juglarín adorado, que me cuida, me consiente, me defiende y me aconseja y hasta se batió sin queja, entre dos damas gurriatas, que en miles de peroratas, acuñaron estas chanzas… y a fin seguirán en ellas.

La Dama de las letras… de Cambio


QUE RÁPIDO OBTUVO RESPUESTA DE SU JUGLAR.


LO QUE PIENSO, SEÑORA, ES ESTO

Permítame decirle que a usted le sobran dos razones y miles, pues de tal fortaleza su alma está hecha.
Y por el bien de su amado esposo, hombre generoso y bueno como es sabido de todos, ha de ser seductora y coqueta con corazón de plata como una estrella, y su luz llena a quien la ama y a quien la adora.
Y no dude nadie de su juicio sereno y fino, que de formalidad está usted repleta, pues persona que dude de su excelsa frescura, ha de verse con persona de rabia llena, que defiende su honor y su pensar en escritura, sin quiebro ni rotura.
Y aquesta pequeña chanza, bien llamada guasa, con respeto la escribo y pensar quiero y préstome en ello, respeto de su arte en explicarse pues palabra a palabra, talento y destreza, lo que voz muestra es canto de sirena.

Ni de Flandes y lejanas tierras permito retos que no cuenten versos mágicos de pensamientos leales y honrados, como son nuestros cuentos.
Y por eso soy humilde, sin querer dejar de serlo. Y en verdad, dama de las letras –que nació con ellas-, admiro su habla escrita. Aprendiz quiero, con su permiso, ser de usted y de sus escritos pues aprendo a ser correcto e irónico, que me ayudan en las formas, las que yo pienso, y su sublime cordura me hace el resto.
Que puedo pensar sino todo esto, de quien muestra fuerza, sensibilidad y encantos prestos a ser descubiertos. ¡Que suerte la mía! y gracias debo a quien, por deseo o destino, cruzaron nuestras plumas de jilgueros cantores, trovadores o poetas en este mundo de mier…mucha pena.


Juglarin Extremeño