lunes, 1 de diciembre de 2008

CONVERSACIONES CON MI ABUELA FELISA


4-06-2001

Ya tiempo que no te tengo, mucho ya que no te miro.
Aunque sé que tu cariño se quedó junto a mi lado
para guiar mi camino.

¡Abuela, mira, ha llovido!
No mi niña, que no es lluvia, son las gotas de rocío
que refrescan las mañanas de la calor del estío.

¡Quiero tejer como tú; enséñame a hacer ganchillo!
¡Claro hija!, yo te enseño, atiende bien que te explico.

Dime también abuelita cómo he de hacer ese guiso
que quiero aprender a hacer esos manjares tan ricos.
Yo te lo enseño mi vida, apunta bien en tu libro.

Y cuando yo sea mamá ¿será como tú me has dicho?
¿sabré dar tanto cariño?
Si pequeña, aprenderás, al nacer tu primer hijo.

Abuelita, y a la Virgen, dime cómo yo le pido
que quiero ser como tú o... ¿existe un libro divino?
No pequeña, no está escrito, la vida es el mejor libro.

Abuelita, ¡no te vayas! Mira que aún necesito,
tus consejos, tus caricias... tu siempre eterno cariño.
No te preocupes mi niña, que siempre estaré contigo.

MI ABUELO RUPERTO

31-12-1998

Fue muy importante en mi vida, el cariño de mi abuelo
aunque de niña no entiendes de sacrificio y desvelos.

Tenía el carácter fuerte, con la edad incluso huraño
pero los malos momentos he olvidado al recordarlo.

Siempre Bendijo la mesa en cena de Navidades
y cuando faltó mi abuelo su sitio no ocupó nadie.
Yo era niña, él, mi Rey Mago.
Supo hacer inolvidable, mágica noche a su lado.

Me cargaba a sus espaldas para buscar mis regalos
reía con mi inocencia volvía a ser un muchacho.
O jugando a Pimpineja al calor de aquel brasero;
a la Brisca, la Monona él, me enseñó aquellos juegos.

En verano a cazar “chirinatos”
con candil y un zurcido costal
nos decía “gritar calladitos”… uno a uno y par a par.

Me inculcó el amor hacia el pueblo
donde nació, creció y ahora yace
y el amor también por la poesía
lo heredé del padre de mi madre.

Se marchó hace muchos años, quizás demasiado tiempo
pero el amor que sembraba sigue vivo y floreciendo.
Se fue sereno y tranquilo, porque llevó puesta al cuello
una medalla y un canto a su Cristo Nazareno.

LOA AL PEDO Y ALEDAÑOS

20-01-2006

LOA AL PEDO Y ALEDAÑOS

 El aire que expele el ano en invierno o en verano

Es putrefacto y siniestro cobarde y hasta inhumano.

¿Quién no ha buscado en su vida, un pedo en un diccionario?

Y al que se pee en directo tildan de ruin y marrano.

 

Aunque en privado es correcto; evitar morir de flato.

Eructar es también sano discreto inodoro y cauto

Soltar el aire molesto para no salir volando.

 

La sabia naturaleza cuando creó al ser humano

Hizo que las inmundicias salgan por boquetes varios

Provocando situaciones de hilaridad o de espanto

Si te sobran desperdicios y no puedes expulsarlos.

 

Lágrimas brotan sin duelo esputos, mocos y cacas

Heces, pis, fluidos varios. Caspa, sudor, mal aliento

Se convierten en tormento cuando quieres ocultarlo

Y aquel gas que no se saca sin duda estallará dentro;

Pedo infernal cuando ataca, pedo oculto, aire siniestro.

 

Pedo fiel mejor que alhaja cuando es sin olor ni tono

No deja huella en la casa y aunque siempre cause risa

Los cautos y ecologistas estamos en desventaja

Porque la capa de ozono dicen que se rompe en masa

Al expeler sin cordura los gases como metralla.

 

Sacudimos orgullosos con la cabeza bien alta

Que peerse sale a cuenta pues en desechos no gasta

Ni compresas, ni pañuelos ni papel, ni bastoncillos

Sólo apretar es sencillo y así el pedorro descansa.




Castrodorrey dijo...
Genial el pedopoema...jajaja...es muy bueno.¿es tuyo?...en cualquier caso, magnífico en rima y contenido.
22 noviembre, 2008 23:27


Marisa dijo...
Me alegra que te guste. Sí, para bien o para mal, es mio. Voy a regalarte otro, así podrás comparar si también te gustan los que escribo en tono diametralmente opuesto, aunque no menos sentidos.Un saludo.Marisa
23 noviembre, 2008 00:18

EL DESTINO NO QUISO

27-08-2006

Valor, torería, coraje, vistió de luces el traje
y el corazón de ilusiones.

De España todos rincones recorrió con torería
aunque la suerte aquel día, no quiso darle sus dones;
apagó el clarín sus sones, pero en nuestros corazones
nunca murió la alegría, de estar al lado de este hombre
que con “Machote” por nombre, lució el pueblo de Alaejos,
donde jóvenes y viejos, gozan de su simpatía
su valor y sus coraje; su siempre franca sonrisa.
Aunque la suerte indecisa, no quiso hacerle famoso,
ha triunfado como esposo y disfrutan su donoso
su mujer; y su hija Elisa.



LA CUNA VACÍA

15‑7‑97
Con ilusión nueve meses preparando sus llegadas;
temor, angustia, alegría; impaciencia, emoción... ganas.
Un mundo de sensaciones, de mucho amor, de esperanza.
La dulce espera tan lenta, volando mil años tarda.

Ya sueñas con su sonrisa, con sus manos, con su cara
y le cuentas en silencio que aunque no le ves, ya le amas.
Y le preparas la cuna, su chupete, la ropita;
perfumas mucho ese cuarto que espera ya su llegada.

Llega el ansiado momento; miedo, dolor, esperanza.
Sin apenas darte cuenta, vuelves con ella a la casa.
Al contemplar a tu niña, ¡la más bonita y más sana!
le das gracias a la vida, que te regaló su alma.

Noches en vela observando su sueño tranquilo, quieto
y de día protegiendo su caminar torpe y lento.
Miras como va creciendo, el tiempo pasó veloz
llega otro retoño nuevo; ella es la hermana mayor.

Vuelve a ocuparse la cuna sigues igual de feliz
vas formando una familia; no crees que te pase a ti.
Y de pronto te das cuenta que ocupada en sus cuidados
se marchó tu propia vida, quizás los mejores años.

Tienes tres muchachitas o muchachitos si es caso,
que van volando del nido; caminan sus propios pasos.
No caben los reproches, tampoco pretendes darlos
si te dan amor inmenso ¡como puedes reprocharlo.

Sólo es una reflexión, otro sentimiento nuevo,
que de repente tus niñas han crecido y no hay relevo.
Porque el tiempo pasó raudo, veloz se pasó la vida
y sabes que para siempre, quedó la cuna vacía.

Esta poesía pertenece a mi libro "Ramillete",
cuya segunda edición se publicó en Agosto de 2007