sábado, 17 de abril de 2010

VIRGEN DE LA CASITA PATRONA DE ALAEJOS EN EL V CENTENARIO- 1990


Ahora que faltan muy pocos días para que la Patrona vuelva a las calles de su pueblo para mostrar su majestad y que Alaejos se rinda a sus pies, he rescatado de  la memoria esta poesía que  recité a mi Virgen con motivo del V Centenario de su aparición, el 10 de Mayo de 1990

30‑01‑1990                                       

EN EL V CENTENARIO

Quiero decirte Señora, cómo te quiere Alaejos,

cómo te echamos de menos, si estamos tus hijos lejos,

cómo siempre te pedimos, que se apaguen nuestras penas,

porque eres nuestro consuelo y la patrona más buena.

 

 Virgen Madre buena, Virgen milagrosa, de entre las mujeres, tú la más hermosa.

Te tiene Alaejos por Madre y Patrona, todos te amamos bendita Señora.

 

Hoy Virgen de la Casita, aquí vengo con amor,

a entregarte aquí, en tu ermita, mi amor y mi corazón.

A decirte Madre buena, que deseo tu calor,

pidiendo que me protejas y me des tu bendición.

 

En momentos de amargura, si me invade la tristeza,

pienso en ti, Madre querida y siento que me consuelas.

Creo que estoy junto a ti, en tu ermita, en tu pradera,

postrada ante ti, se apagan todas mis penas.

 

Tu rostro dulce sonríe, me coges entre tus brazos,

acaricias mis cabellos, pones un beso en mi frente,

me hablas despacio al oído y me duermo en tu regazo.

Sueño que soy muy feliz, que me abrazas tiernamente.

 

Hoy el quinto centenario se viene a conmemorar,

todo el pueblo de Alaejos te ha venido a visitar,

Unos portándote en hombros, otros te van a bailar,

pero todos han venido, nadie ha querido faltar.

 

En mi pecho permanente, guardo para ti un altar,

para que mores en él como si fuera tu ermita,

Vivo para adorarte. Madre, tú toda bondad,

y decirte cada día: te quiero, mi Chiquitita.


Esta foto pertenece al año 2000, cuando la Virgen de la Casita pasó por la puerta de mi casa.

domingo, 4 de abril de 2010

NO TE METAS DONDE NO TE LLAMAN


31-03-2010       

NO TE METAS DONDE NO TE LLAMAN


No intentes meter el cuezo en asuntos de otro plato,

Ni escuches sólo a una parte, que puedes hacer más daño.

 

Pues que en una discusión suele haber varias versiones,

Contrasta antes de juzgar la balanza cambiará,

Si te explican sus razones.

 

Ten seguro que los dos han de tener evidencias,

Nadie es culpable del todo, si demuestra su inocencia.

 

Cada uno en su versión, en el fragor de la lucha,

Querrá tener la razón, mira a sus ojos y escucha.

 

No hagas juicios sin razones, no prejuzgues que es muy feo,

Quizás salves al culpable, y al inocente hagas reo.

 

Aprende a ver la verdad, y mejor no digas nada,

Distinguirás qué era cierto y qué verdad inventada.